domingo, 23 de noviembre de 2008

Deja de ser magia cuando desvelas el truco,
el público miraba atento,
asimilando lo ocurrido.
Se levantó uno entre los presentes y se fue,
poco a poco fueron abandonando la sala,
hasta que quedó vacía.
El mago se quedó de pie,
enfocado con una luz blanca en medio del escenario,
sin saber muy bien que hacer,
pero no podía pedirles que se quedaran,
no lo había hecho bien,
esperó a que bajara el telón,
quedándose entre bastidores.

El espectáculo había acabado

1 comentario:

Sara sagapó dijo...

lo intentó quizás.
deseó con todas sus fuerzas hacerlo bien. que el publico aplaudiera hasta q le dolieran las manos.
Pero qué duro es cuando ves como todos se van y ni siquera se vuelven a mirar cómo acabará todo.

Cuando incluso tú dejas de confiar en tu magia.